La celebración del “baby shower” como hoy día la conocemos es una fiesta relativamente nueva, pero las ceremonias y rituales asociados con el embarazo y el parto son antiguos y sus orígenes se remontan a tiempos ancestrales, y han ido variando a lo largo de diversas épocas, pero siempre manteniendo su esencia: ofrecerle a la futura madre la oportunidad de conocer y experimentar la sabiduría de mujeres más maduras, quienes brindarán herramientas y consejos para cuidar a su recién nacido, además de regalos de bienvenida.
La mayoría de los Baby Showers se celebran antes del nacimiento del bebé, por lo general de cuatro a ocho semanas antes de la fecha de término. Pero es perfectamente aceptable elegir una fecha que sea uno o dos meses después de que nazca el bebé.
Antes se acostumbraba invitar únicamente a las amigas de la mamá, pero ahora ya no hay límites, puedes agregar a la lista de invitados a quien tú quieras, incluso hombres y los amigos de tu pareja. El punto es celebrar a tu bebé y por qué no, ¡recibir más regalos!
Para la celebración lo más práctico es tener un servicio de banquetes donde no falte una mesa dulce con unos ricos postres. Tampoco olvides las bebidas, teniendo opciones sin alcohol.
La temática de tu baby shower, el cual puede estar basado en el género de tu bebé o en algún mundo que te parezca divertido como el viejo oeste, el espacio o la selva. En esta parte tu imaginación será el límite.
Los juegos relacionados con la maternidad y el bebé son de los momentos más esperados en todos los baby shower y en ellos participan todos los invitados incluidos, claro está, los futuros papás. Te compartimos algunos que te servirán de inspiración.
Simular un embarazo: Los invitados pueden ponerse un globo en la barriga e intentar atarse los cordones de sus zapatos. Mamá no necesita el globo por supuesto. Y gana quien menos globos rompa.
Adivina adivinanza: Prepara una lista de preguntas sobre la futura mamá y pídeles a las invitadas que den sus respuestas. Luego se comparan con las respuestas reales de la madre.
Como un bebé: Probar a tomar un biberón sin usar las manos. Gana el que antes lo consiga.
Cuánto mide la panza de la futura mamá: Es muy habitual tener que recortar tanto rollo de papel higiénico como diámetro se cree que tiene su barriga. Está claro que gana quien más se aproxime.
Un recuerdo para el futuro bebé: Cada invitado puede escribir una dedicatoria o deseos para el recién nacido y guardarlos en una caja. Mamá no los debe leer hasta que tenga a su bebé en los brazos.
Como en cualquier fiesta, no son obligatorios, pero no tengas pena de organizar una mesa de regalos en la que puedas tener una lista de las cosas que necesitas o necesitará tu bebé. Pueden ser pañales, artículos, juguetes y muebles. Así, le ayudas a tus invitados a saber qué regalarte y también a tu economía.
Y lo más importante, disfruta todo el proceso, desde la organización hasta la celebración. Estos momentos se quedarán en tu mente por el resto de tu vida, así que visualízalos siempre de forma positiva y olvídate del estrés.
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